
Por el momento se trata de una flota de diez vehículos (Mini Cooper y Renault Clio Grand Tour) repartidos en siete aparcamientos de los distritos de Centro, Chamberí y Salamanca, para recoger en el momento y utilizar durante el tiempo que se necesite.
Según resposables de la marca, un coche pasa el 97% del tiempo aparcado, así que esta puede ser una opción para quienes, siempre según la compañía, realicen menos de 12.000 km al año. Echando cuentas, el precio fijo es de 15 céntimos de euro el minuto, es decir, 9 euros por cada hora de utilización.

En el caso de los modelos familiares se incluye además un navegador GPS. No sabemos si dan por hecho que los padres tienen un menor conocimiento metropolitano.
Ahora la letra pequeña: en la tarifa se incluyen 200 kilómetros, y es necesario hacerse socio de la empresa mediante el pago de una cuota de 50 euros anuales. También es necesaria una fianza que asciende a 100 euros, que se devuelven al darse de baja en el servicio.

De todas maneras, y tal como están las cosas, suponemos que las condiciones variarán si llegan a implantarse, principalmente porque los costes de un vehículo de este tipo son muy distintos.
Para ponernos en situación, en Europa casi medio millón de conductores utilizan este servicio. Lo más llamativo es que casi un tercio de ellos declararon tras probar el sistema que se plantean vender su coche particular, o no renovar el que actualmente utilizan.
En España ya existen redes de carsharing en Barcelona, Sabadell, Sant Cugat o Granollers. Para Madrid, el Ayuntamiento prepara una alternativa pública de transporte denominada “MyBici”, que pretende fomentar el uso de la bicicleta en la ciudad.
Fuente:www.motorpasion.com